Tratamiento de adicciones
El tratamiento de adicciones se basa en un enfoque integral que busca ayudar a las personas a superar su dependencia. A través de diferentes fases, se abordan tanto los aspectos físicos como psicológicos de la adicción.

¿Cómo te ayudamos?
Evaluación clínica inicial
Se realiza una valoración completa del estado de salud general, el tipo de adicción, su duración y los factores asociados (ansiedad, depresión, insomnio, etc.).
Plan de intervención personalizado
Dependiendo del caso, se puede trabajar desde una perspectiva médica, psicológica o combinada, en coordinación con otros profesionales si es necesario.
Seguimiento y apoyo continuo
El tratamiento incluye sesiones periódicas, seguimiento de evolución y estrategias para prevenir recaídas. También se orienta a la familia si el paciente lo desea.

La adicción se define como una enfermedad crónica caracterizada por el consumo compulsivo de sustancias o la realización de comportamientos, a pesar de las consecuencias negativas que puedan acarrear. Se presenta como un trastorno complejo que involucra cambios en el cerebro y en el comportamiento del individuo.
El tratamiento de adicciones incluye la desintoxicación, terapias psicológicas y programas de rehabilitación. Además, se incorpora un fuerte componente de apoyo comunitario y familiar para facilitar la recuperación y evitar recaídas.
Comprendiendo la Adicción
Este proceso incluye la desintoxicación, terapias psicológicas y programas de rehabilitación. Además, se incorpora un fuerte componente de apoyo comunitario y familiar para facilitar la recuperación y evitar recaídas.
La comprensión de la adicción es fundamental para abordar esta problemática de manera adecuada. Esta sección profundiza en las características, los tipos y los factores de riesgo asociados con las adicciones.
Factores de riesgo asociados
Existen múltiples factores que pueden contribuir al desarrollo de adicciones. Estos se agrupan en categorías biológicas, psicológicas y sociales.
- Factores biológicos: la genética juega un papel importante, ya que ciertos individuos pueden tener una predisposición a desarrollar adicciones.
- Factores psicológicos: la presencia de trastornos mentales, como la ansiedad o la depresión, puede aumentar el riesgo de caer en adicciones.
- Factores sociales: un entorno familiar disfuncional, la presión de grupo y la normalización del consumo de sustancias en la sociedad pueden favorecer el inicio y mantenimiento de adicciones.